jueves, 16 de mayo de 2013



No tenía nada que decir, la vida estaba ocurriendo como nunca, llena de quehaceres y miserias humanas... pero despegué... abrí la ventana, respiré el aire frío de esas araucarias lejanas ya en el tiempo y me reconocí... claro que soy yo, y apenas me lo digo la palabra vuelve a tomar sentido y a transformarse en varita mágica, talismán, llave secreta, caja de pandora... GRACIAS TOTALES!!!!